Raciel Feria pone su ingenio creador al servicio del Festival de Documentales Santiago Álvarez
Muchos conocen la trayectoria artística del maestro de la cerámica Raciel Feria. Gracias a su ingenio creador diversas piezas con su firma adornan hoteles, parques y centros científicos. Su persistente y valioso trabajo comunitario también trasciende.
Pero lo que quizás sea menos divulgado es su arduo trabajo para el Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez in Memoriam. El evento, que enaltece la labor del realizador cubano y propicia el intercambio con los nuevos realizadores audiovisuales, tiene en Raciel Feria un fiel aliado.

Y es que Feria lleva el mérito de crear para cada edición del festival el trofeo y las placas que se llevan a casa los ganadores. La idea surgió a partir de uno de los lauros que se le entregaron a Santiago Álvarez. Desde su concepción se pensó en una obra de pequeñas dimensiones y fácil de transportar. La imagen de una cámara de cine fue ideal para representar al documental y armonizar con sus colores y soportes.
Según declara Raciel Feria, recuerda con agrado la pieza creada para celebrar el centenario de Santiago Álvarez. En esa oportunidad la obra resaltaba por su color rojo como símbolo de alegría y vitalidad. Para el ceramista el reto está en que cada edición tenga un premio diferente y que aluda al certamen del documental por excelencia en Cuba.

Feria no conoció al realizador de los documentales que hoy sirven de pretexto al evento. No obstante, disfrutó de su obra audiovisual y agradece que el festival se mantenga y favorezca la producción del género. Reconoce además la esmerada labor de sus organizadores y siente como un honor que su obra, de conjunto con la de su proyecto comunitario, sea parte esencial del certamen.