La muestra Sábanas Blancas llega al espacio virtual luego de un feliz trayecto por la ciudad.
Surge Sábanas Blancas de la creatividad artística de Ernesto Millán Hechavarría quien trueca este objeto utilitario en obra de arte. Mientras ellas baten despreocupadas desde patios y balcones, el artista las sueña como lienzos.
Así surge una muestra que tuvo feliz recorrido por los “Ríos Intermitentes” de la pasada XIII Bienal de La Habana. Las Sábanas Blancas de Millán ganaron espacio en el centro de la urbe matancera de la que es oriundo. Exhibían vanidosas las fotografías que el artista estampó en ellas, y que el público en breve disfrutó hasta formar parte del proyecto.
Según expresa el anuncio de la exposición “Las fotografías impresas en sábanas y fundas de almohadas, se integraron a la vida cotidiana de veinticinco familias que documentaron con sus propios medios, sus experiencias y vivencias personales, cómo se interrelacionaron con las obras de arte”.
En busca una vez más del protagonismo de los espectadores y en tiempos de pandemia, regresa Sábanas Blancas. En esta ocasión lo hace desde el espacio virtual y con el apoyo del Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño de La Habana y de la Dirección Provincial de Cultura de La Habana.
A la versión en línea de Sábanas Blancas llega también un video de 27 minutos. Es esta una suerte de recopilación de los audiovisuales que recogen las historias de interacción de las personas con la obra.
La intervención Sábanas Blancas marca la carrera de Ernesto Millán Hechavarría, quien es un apasionado de la fotografía. Otras exposiciones engrosan su quehacer artístico, pero de esta agradece la oportunidad de compartir el arte con los espectadores quienes se tornan imprescindibles para la muestra.