Valiosas obras de Miguel Matamoros en una antología al estilo de Ecos del Tivolí
No por esperada es menos grata la llegada del álbum Juramento. Antología Matamorina. Los seguidores del exhaustivo trabajo que la agrupación santiaguera Ecos del Tivolí realiza con la obra de Miguel Matamoros, estaban al tanto.
En los meses precedentes la Casa Discográfica Bis Music, responsable del compacto que hoy se presenta, lució valiosos adelantos. Ya supimos de la gracia del pregón Coco seco enriquecido con la singular interpretación de Mayito Rivera en respetuoso homenaje a Matamoros.
También supimos de El que siembra su maíz. En el single la reverencia al mítico sonero llegó en voz del puertorriqueño Gilberto Santa Rosa. Acompañado por Ecos del Tivolí, la tradicional pieza de Matamoros, adquiere matices contemporáneos muy disfrutables.
Y con esos antecedentes llega íntegramente Juramento. Antología Matamorina. Reservado para las celebraciones por el Día del Son cubano, el álbum doble recoge valiosos obras de Matamoros. Sobresale en esta entrega el trabajo de selección de las piezas así como su reinterpretación.
En las voces de la alineación santiaguera y sus invitados renacen temas de Matamoros de diversos géneros. Algunos ampliamente divulgados tendrán el inmediato favor del público. Otros, menos difundidos permitirán conocer a plenitud la capacidad creativa de un autor imprescindible en la historia de la música cubana.
Acudieron al homenaje a Matamoros invitados de lujo. A los ya mencionados se suman los boricuas Danny Rivera, Choco Orta y Andy Montañez. De Cuba se integraron, con Ecos del Tivolí, Haydée Milanés, María Victoria Rodríguez, Sixto “El Indio” Llorente y Zulema Iglesias.
Disfrutemos entonces de Juramento. Antología Matamorina, una producción a la altura del prolífero autor que fue Miguel Matamoros. Pero también merecido regalo a un pueblo que ha sabido conservar y defender lo más autóctono de su música y cultura.
